Esta tarta está endulzada solamente con fruta y fruta seca. Aparte, es y sin gluten.
La he ido haciendo sobre la marcha para un desayuno improvisado, mientras Marta y Jose dormían la mona... así que las cantidades son un poco a ojo...
Mi intención era hacer una tarta suave y ligera, con mucha fruta, y con una base que no fuera pesada ni llevara harina. El resultado ha gustado mucho.
Ingredientes
Para la base
- 50gr de dátiles
-100gr de harina de arroz integral
- un puñado grande de nueces
- 100gr de almendra molida
- 100gr de coco rallado
- 4 cucharadas soperas de aceite de oliva
- vainilla
- un vaso de agua tibia
Para el relleno
- 500gr de fresas- 2 plátanos
- 2 manzanas golden grandes
- 4 gramos de agar-agar
Triturar los dátiles y mezclarlos con el aceite, la almendra molida, el coco, las nueces y la harina de arroz. Poco a poco con la mano. Después añadir el agua tibia, sólo hasta que quede una masa aglomerada pero moldeable. Echarle vainilla. Extender en un molde engrasado y poner al horno 20 minutos hasta que esté echa.
Mientras, triturar las manzanas, uno de los dos plátanos y todas las fresas (con un vaso de agua o leche vegetal para que no esté tan denso). Poner a fuego suave 10 minutos y después añadirle el agar-agar. Dejar hervir durante 3 minutos a fuego fuerte y retirar. El agar-agar hará que el relleno de la tarta sea como gelatinoso.
Verter en la base antes de que se enfríe. Por encima, cortar el otro plátano crudo a láminas y dejar enfriar fuera o en el frigorífico.
ÑAM! super
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