Mi tradición de hacer mermelada de naranja empezó un invierno con Laura y Andrea.
En esa época yo tenía guardado en la agenda el teléfono de un tal Francesc que traía naranjas ecológicas de Valencia a un euro el kilo.
Después de hacer un viaje a Francia juntas, decidimos hacer un pedido de unos veinte kilos y estuvimos un domingo las tres en la Barceloneta haciendo mermelada.
Laura es muy sobria con los postres, suele echar poco azúcar y le encanta hacerlos con harina integral y fruta. Pero también es muy delicada, remueve lentamente las mezclas y cuida mucho que las cosas se hagan a fuego lento.
Me acuerdo que ese día estuvimos cocinando muchas horas y las paredes del piso se quedaron un poco pegajosas por la mezcla de fruta y azúcar.
Las mermeladas nos salieron deliciosas, cremosas y suaves.
Los últimos años he seguido un par de veces esa tradición. Más o menos por febrero suelo hacer un macro pedido de naranjas a productores de cítricos ecológicos de Valencia.
Voy cambiando, aunque este año creo que ya he encontrado a "los definitivos".
Me las suben a casa y suelo hacer pedidos grandes para que compense con el transporte y, también, porque ya que la mermelada de naranja requiere bastante trabajo, aprovecho y hago muchos botes de golpe. Este año he pedido la barbaridad de 40 kgs.
40 kilos de naranjas para dos manos solas son MUCHOS kilos.
Hoy, una vez acabada la faena, os escribo con ampollas y cortes en los dedos.
No exagero, parece que haya talado un bosque.
Pero en mi despensa, bien guardaditos en un estante, tengo unos 50 botes de mermelada de naranja con diferentes especias, listos para ser regalados, comidos, enviados y todas los usos que se me ocurran:
La receta la escribo con cantidades más manejables, pero es muy sencillo, sólo hay que multiplicar según los kgs de naranjas que tengas.
Bueno..., e improvisar mucho también.
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Ingredientes
- 6 kg de naranjas (mejor bio)
- 3 kg de azúcar integral (en realidad el azúcar que más te guste usar)
- canela
- jengibre
- vainilla
- (un trozo grande de calabaza opcional)
La proporción de azúcar en esta mermelada es de un 50%, y hasta se puede endulzar menos, según tus gustos.
El procedimiento es un poco laborioso, pero vale mucho la pena.
Pelar las naranjas, siendo muy minucioso para que no les quede nada de blanco (eso es lo que podría amargar la mermelada). Reservar una parte de las pieles.
Cortar la carne de la naranja a dados.
Mondar bien la piel para retirar gran parte de lo blanco y cortarla fina a tiritas.
Ponerla en una cazuela a cocer con un poco de azúcar y un poco de zumo de naranja. Cuando esté un poco hecha, echar la naranja y el azúcar y poner el fuego bajo. Si quieres también puedes añadir unos pedazos de calabaza para tener una mermelada de naranja y calabaza muy cremosa.
Removemos de vez en cuando y dejamos cocer la fruta unas cuatro horas hasta que esté bastante densa.
Al cabo de un rato puedes añadir otros elementos para hacer mermeladas con toques de especias: una vaina de vainilla, o un trozo de canela, o jengibre a trocitos.
Yo he hecho botes con cada sabor, cocinando las mermeladas separadas en diferentes cazuelas.
Quedan deliciosas, cremosas y con el punto justo de dulce.
Un año, un amigo se comió el bote que le regalé literalmente a cucharadas.
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